Beneficios del deporte en los niños
Gastar energÃa, encontrar su equilibrio y compartir momentos de placer con otros compañeros, adquirir seguridad y confianza en sà mismo,... Los beneficios del deporte son múltiples para los niños. A continuación te hemos preparado un artÃculo con el que verás la importancia del deporte para el desarrollo de los niños.
Niño y deporte, un binomio ganador
Las razones son múltiples. En primer lugar, el deporte contribuye a favorecer un crecimiento sano y equilibrado, con beneficios notorios desde un punto de vista fÃsico y psicológico. La actividad deportiva debe ser practicada correctamente, teniendo en cuenta las caracterÃsticas fÃsicas del niño, su edad y sus aptitudes. El deporte permite también romper con el estado sedentario que caracteriza la existencia de las nuevas generaciones.
El deporte practicado desde la edad más temprana permite a la vez mejorar las prestaciones fÃsicas del niño y facilitar su socialización con otros niños, estimulando su desarrollo. No obstante, ciertos parámetros deben ser tenidos en cuenta para el bien y la salud del niño.
Tan pronto como el niño es capaz de expresar sus preferencias para tal o tal actividad, es bueno dejarle la elección de practicar la actividad que desea, sin imponerle nuestros propios deseos. Si la elección del niño es de un deporte inadaptado para su edad, hablad de eso con él, explicándole las razones de la imposibilidad de inscribirle en ese deporte. Puedes pensar como alternativa, apuntarle a un deporte más accesible, aunque similar, y proponérselo al niño.
También debes saber que cualquiera que sea la actividad deportiva, puedes asistir a una sesión con el niño sin compromiso con el fin de hacerle descubrir el desarrollo del mismo. La mayorÃa de clubes también proponen la participación gratuita del niño a una o dos sesiones con el fin de que el "pequeño deportista" descubra realmente el deporte.
Es importante que la disciplina deportiva practicada por el niño sea completa para un desarrollo armonioso de la musculatura del niño. Cualquier actividad intensa será perjudicial para el pequeño en la medida en que ciertos grupos musculares corren peligro de ser solicitados mucho más que otros, lo que creará un desequilibrio en la evolución del niño en pleno crecimiento.
Si el niño parece siempre cansado o si se queja de dolores, interrumpa el entrenamiento durante una semana con el fin de que descanse. Un esfuerzo excesivo o inadaptado a la edad del crecimiento, puede ser nefasto para el niño. Recordemos que la actividad deportiva para el niño debe ser, ante todo, un placer, una distracción y no un desafÃo constante.
|