Cuidados de un bebé prematuro
Generalmente, un embarazo prematuro genera un estrés importante: el paso por la incubadora, los tubos y otros gestos médicos son a veces difÃciles de sobrellevar. Pero debéis estar tranquilos y confiar en el equipo médico para que los primeros momentos de la vida del bebé pasen a mejor. Una vez el bebé en casa, pueden venir problemas de salud, pero es posible limitarlos tomando ciertas precauciones en los primeros meses de la vida y asegurando un control regular del niño.
De manera general, los problemas eventuales conciernen especialmente a los bebés muy prematuros (menos de 32 semanas de gestación). En los primeros meses de vida, las infecciones de las vÃas respiratorias son el principal problema que afecta a estos niños. En el 5 - 10 % de los casos, pequeñas imperfecciones motores pueden aparecer en los dos primeros años de vida. En un 1% de los casos, problemas auditivos pueden aparecer. Y en un cuarto de la mitad de los casos, problemas de visión: estrabismo, ambliopÃa,... todos estos problemas pueden ser subsanados gracias a dispositivos apropiados existentes.
Precauciones de base
Un bebé prematuro es un poco más frágil que otros bebés los primeros meses de vidad. Por tanto, al volver a casa con el pequeño, ciertas precauciones se imponen. Lo esencial no te preocupes que te lo comunicará el médico antes de abandonar el hospital. Quizás lo primordial sea que tengáis bien claro y bien localizado la persona y el lugar al que tengáis que acudir en caso de necesidad.
Otras precauciones son preparar la habitación de la casa para el pequeño (la temperatura debe estar alrededor de los 19°C), alejar a los animales domésticos por un tiempo, lavarse las manos antes y después de los cambios y antes de cada comida del bebé. Además de consultar al médico ante cualquier duda o anomalÃa que detectes en el bebé.
Atención a los problemas respiratorios en invierno
En los primeros meses de vida, el bebé prematuro a menudo es de nuevo hospitalizado. Suele ocurrir en casos de bebés nacidos con menos de 2,5 kg. De estos, un tercio vuelve al hospital al menos una vez. La causa de este retorno es generalmente debido a problemas respiratorios.
Y es que el bebé, al nacer demasiado temprano, tiene sus pulmones inmaduros. Y son, por tanto, frágiles. El peligro: las infecciones invernales, y particularmente el virus de la bronquiolitis.
Hay que huir del contacto con personas que presentan una infección de las vÃas respiratorias. Si sois alguno de vosotros los afectados, lavaros bien las manos y llevar una máscara ante el bebé. Y sobre todo, el primer invierno del bebé, debemos evitar los lugares públicos y los transportes colectivos. Finalmente, debes saber que existe una vacuna preventiva que puede ser administrada a los bebés prematuros.
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